La Voz Perdida del Rey Silencioso


Los personajes de ficción pueden ser vistos de tantas formas diferentes como personas entran en contacto con ellos. Las obras literarias y las películas pueden ser ventanas a través de las cuales podemos aprender muchas cosas sobre las personas, la vida, el mundo, el universo, nuestra esencia como seres espirituales, y pueden ser también espejos, en los cuales encontramos piezas de nosotros mismos de las que podemos o no ser conscientes. Sea lo que sea lo que los personajes de ficción nos digan, lo hacen mientras les vemos metidos en sus vidas, haciendo cosas, hablando, pensando, sintiendo, siendo.

Podemos encontrarlos ya creados por alguien más. Muchas perssonas tienen sus personajes favoritos y los mantienen vivos dentro de sí desde que se encontraron con ellos.

Podemos, también, crearlos y, para hacerlo, desde luego no necesitamos haber sido reconocidos oficialmente como escritores. Cada persona es una escritora, tanto si escribe como si no. Hay tantas formas de crear un personaje de ficción como personas, si no más. En realidad, no hay ningún límite a lo que podemos hacer cuando los creamos, de manera que podemos, por ejemplo, crear un personaje formado por partes de personas que conocemos, o de nosotros mismos. Ese es el caso del Rey Silencioso, del libro que estoy escribiendo, La Voz Perdida del Rey Silencioso, el tercero de la tríada Un World Diferent:

"En un lugar que no se puede encontrar y que es, a la vez, todos los lugares; en un tiempo que siempre es y nunca termina, hubo y hay un rey perdido, el Rey Silencioso, quien nunca ha sido capaz de encontrar su propia voz. Hubo y hay un reino esperándole, y ese reino está a su alrededor pero, especialmente, dentro de él. Su reino interior y su reino exterior le están llamando, necesitados. Pero la voz del rey todavía está perdida. Él es, todavía, el Rey Silencioso.
Nunca imaginó que un día se encontraría a sí mismo preguntándose sobre esa sensación de vacío. Siempre la había sentido, había vivido con ella, incapaz de darle nombre. Pero un día, algo dentro de él la señaló incansablemente. Fue entonces cuando se dio cuenta. Ese fue el momento en el que se quedó realmente en silencio, porque, de repente, supo que era así como estaba. Otros lo supieron antes que él. Pero nadie puede decirnos quiénes somos. Solo nosotros podemos.
Ahora empezaba a hacer conscientemente un viaje, el mismo viaje que, sin saberlo, había estado haciendo toda su vida. Su destino era todavía igualmente desconocido para él, pero solo podía ser uno: él mismo. No sabía que estaba en camino de convertirse en rey."

Cuando empecé a escribir esto, solo sabía que el Rey Silencioso todavía no había encontrado su voz. Detrás de esto había años de vivencias de varias personas que había conocido, así como experiencias propias. Esta historia nació de una intensa sensación de estar estancado, confundido, y perdido. Pero, a medida que la página se fue llenando dentro de mí, y saliendo, me di cuenta de que se había desencadenado en mi interior un proceso de auto-indagación, y que algunas respuestas estaban empezando a aparecer justo delante de mis ojos, a medida que mis manos escribían. Fue casi como escribir directamente desde lo sentido, sin pensar. El pensamiento vino después, a medida que empezaba a leer lo que había escrito. Al final de esos breves tres párrafos, la sensación de pérdida, confusión y estancamiento se encontraba con los ojos de una nueva e incipiente sensación de comprensión de mí mismo y de orientación con un propósito.

El viaje interno que empezó con la escritura de esas líneas no era tanto personal, concerniente a mi vida privada, como profesional. Crear un personaje de ficción a partir de lo que ya estaba dentro de mí, arrojó luz sobre las primeras pistas de un proceso que siguió desarrollándose a partir de ese momento.

Como dicen Celia Hunt y Fiona Sampson en su libro The Self on the Page. Theory and Practice of Creative Writing in Personal Development (El yo en la página. Teoría y práctica de la escritura creativa en el desarrollo personal):

the act of placing oneself and one's experience on the page in fictional form can be a means to a deeper self-engagement and self-understanding

 

el acto de situarse a sí mismo y la propia experiencia en la página en forma de ficción puede ser un medio hacia un más profundo compromiso con uno mismo y una más profunda comprensión de uno mismo

 

Los procesos de desarrollo personal y profesional se pueden beneficiar enormemente de la práctica de la escritura creativa. Podemos leer muchos libros y artículos sobre ello, y podemos también escribir, y escribir más, y todavía más, y experimentarlo por nosotros mismos.

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